Rehabilitación energética de edificios. ¿Cuándo se debe hacer?
Con el paso de los años, los edificios se deterioran y es el momento de invertir en el programa de rehabilitación energética de edificios. ¿En qué consiste este programa? ¿En qué momento hacerlo? ¿Qué subvenciones y ayudas existen? Lo analizamos todo en la siguiente guía.
Guía | Rehabilitación energética de edificios
En tiempos de mejora de la eficiencia energética, cada poco tiempo vemos a edificios antiguos renovando la fachada, para tratar de mejorar el aislamiento y ser más eficiente. Pero: ¿este tipo de obra está subvencionada? ¿O simplemente se hace porque se traduce en un ahorro económico para los propietarios? En algunos casos, las dos cosas, dado que se puede acceder a subvenciones.
Edificios que necesitan rehabilitación energética
La mayor parte de los edificios que necesitan esta rehabilitación energética, se construyeron entre las décadas de los años 80 y 90. Por aquel entonces no existía el concepto de eficiencia energética y de cambio climático tal y como lo conocemos hoy. Sin embargo, hoy en día se trabaja hacia la rehabilitación energética de los edificios, principalmente los construidos en esa época.
En los edificios de nueva construcción, se ha establecido que para el 2030 todas las construcciones nuevas sean 0 emisiones. Mientras que en los edificios ya construidos, se estima que para el 2050 todos tendrán características verdes.
Por lo tanto, siguiendo el plan, se espera que antes de nada se reformen los edificios de los años 80 y 90. Mientras que hacia el final, irán los de los años 2000. Es decir, a medida que los edificios tengan unos 40 años.
¿La rehabilitación energética de edificios es obligatoria?
Si prestamos atención a los objetivos del Pacto Verde Europeo, para el año 2050 la huella de carbono debe ser neutra. Por lo que los hábitos de consumo y las instalaciones deberán adaptarse a esta realidad de la eficiencia energética.
Si bien es cierto que aunque hoy en día no es obligatorio, se espera que para el año 2030, el 30% del parque de edificios disponga de las características del plan de rehabilitación energética.
Hoy en día, solamente un 16% de los edificios españoles tienen la etiqueta de eficiencia energética por encima de E, F y G. Y las viviendas con la máxima eficiencia energética no suman ni el 0.30% del total. Teniendo en cuenta todo esto, es necesario un plan de rehabilitación energética de edificios y queda mucho por hacer.
¿Qué subvenciones de eficiencia energética existen?
Para realizar este cambio hacia una vivienda más sostenible, existen ayudas dirigidas a comunidades de propietarios. No descartamos que con el paso de los años surjan nuevas, pero actualmente hay un programa de ayuda a nivel estatal con subvenciones para rehabilitar energéticamente los edificios antiguos.
Este plan es el PREE 5000 que ha sido financiado por los fondos Next Generation del plan de recuperación, transformación y resiliencia del Gobierno. Se trata de un programa de ayudas dirigido a edificios en localidades de menos de 5000 habitantes. Por lo que no es para ciudades o capitales. En cuanto a las cuantías, puede llegar a subvencionar el 40% del coste total de la reforma de eficiencia energética.
Por otro lado, también es importante mencionar que hay programas para adquirir equipos de energías renovables. Por ejemplo, la solar fotovoltaica, que dispone de ayudas directas y de deducciones fiscales.
A su vez, el Gobierno también aprobó el Plan de Vivienda 2018-21 con ayudas a la rehabilitación de edificios y que estará vigente hasta 2022. Aunque no sabemos si sufrirá de renovaciones. En cualquier caso, está enfocado a edificios con una antigüedad anterior a 1996.
Conclusiones
Teniendo en cuenta los objetivos fijados para el año 2050 y considerando que solamente el 16% del parque de viviendas español tiene una certificación energética superior a las letras E, F y G, es importante tomar medidas lo antes posible. Las consecuencias del cambio climático ya se conocen y hay que tomar medidas.
Una serie de medidas que comprende 4 fases:
- Reducción de la demanda de energía. La primera fase consiste en ahorrar la máxima energía posible, por lo que es importante que el inmueble esté bien aislado, bien orientado y protegido de la radiación solar o de filtraciones de agua o de aire.
- Disminución de consumo de energía. La siguiente fase consiste en mejorar el rendimiento de las instalaciones y equipos, reemplazando las viejas calderas, por ejemplo con el plan renove de calderas de gas natural, o aparatos de aire acondicionado o calefacción por equipos más eficientes.
- Implantación de energías renovables. Es importante instalar equipos de energías renovables, como puede ser la energía fotovoltaica o termosolar.
- Gestión energética. Por último, pero no menos importante, es necesario contratar un servicio de auditoría para controlar el consumo y establecer normativas internacionales como el ISO 50.001.
Estas fases harán que tu inmueble sea considerado 0 emisiones, por eso es importante empezar a trabajar en ello lo antes posible. Sin duda, ese es el camino, por lo que solo queda conseguirlo. ¿Te ha quedado alguna duda?